Ayer comentaba en este blog que la presidenta de la asociación “11-M Afectados por el Terrorismo” Pilar Manjón, se oponía a que se siga investigando la masacre del 11 de marzo de 2004 para saber quienes fueron los que le mataron a su hijo y 191 inocentes más.
Durante el homenaje a las victimas del 11-M que esta asociación, vividores sindicalistas de Comisiones Obreras (CCOO), Unión General de Trabajadores (UGT) y artistas de la ceja hicieron ayer en el monumento de la estación de Atocha de Madrid arremetió contra el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, por reabrir la investigación de esta masacre, y señaló que “conseguirán que algún día se deje de creer en la justicia democrática” así mismo le recordó al fiscal general que “los crímenes ya están juzgados” y los criminales, condenados.
Creo que nadie podemos sentir el gran dolor que siente una madre a la que le mataron a un hijo en el tren que explotó en El Pozo, y más aún en las circunstancias que lo hicieron, pero que esta señora se oponga a que se aclare este misterio, y si hay más culpables que paguen por ello y no queden impunes, no lo entiendo, salvo que su fanatismo comunista y su odio al Partido Popular (PP) no le dejan ver más allá de sus narices.
También la Asociación de Victimas del Terrorismo (AVT) celebró otro homenaje a las victimas en el “Bosque del Recuerdo” del parque de El Retiro madrileño. Al acto asistió además del ministro de Justicia, la directora general de Ayuda a las Víctimas del Terrorismo, Sonia Ramos, el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella; la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste y representantes del partido político Unión Progreso y Democracia (UPyD).
El acto finalizo con unas palabras de su presidenta Ángeles Pedraza -que también le mataron una hija-, que dijo: "la justicia nunca será completa, o mínimamente reparadora, hasta que no se sepa toda la verdad de lo ocurrido aquel terrible día de marzo", y -en contra de lo que dijo Manjón- “el 11M es un caso abierto y ahora más que nunca".