Ayer durante la asamblea general de socios de la Associació de Veïns Sector Torre de la Vila Residencial, de Sant Boi de Llobregat (Barcelona), que celebramos en el Casal de Barri Casablanca, debido a mi estado de salud y aconsejado por mi cardiólogo presenté la dimisión como presidente de la misma.
Desde el año 1997 un grupo de vecinos/as no hemos dejado de trabajar por el barrio, ya que al ser éste un barrio que se empezó habitar en 1994 tenia muchas necesidades.
Aquí quiero dejar constancia de algunas de las mejoras más importantes que gracias al trabajo y sacrificio de mis compañeros/as de junta, y con el apoyo de los vecinos hemos conseguido.
En el año 1998, solicitamos unos semáforos en el cruce Ronda Sant Ramón - calle Joventut - Av. Onze de Setembre, ya que la Ronda era como una autopista de dos carriles en cada sentido y cruzarla era un peligro, principalmente para los niños y las personas mayores, el Ayuntamiento no quiso saber nada de semáforos porque tenía previsto construir en su día una rotonda, pero conseguimos que ésta se construyera de inmediato.
En el año 1999, conseguimos que el Ayuntamiento abriera una salida de emergencia en la sala de actos del Casal de Barri Casablanca, ya que esta sala está situada en un primer piso y debajo hay un bar con cocina que en cualquier momento se puede producir un incendio o explosión, con lo cual las personas que se encontraran en la sala en este momento no hubiesen podido salir.
En el año 2001, conseguimos que el Ayuntamiento retirara el proyecto que tenía para construir 40 viviendas, unas encima del mercado y otras delante, exactamente donde hoy hay el parque infantil en la plaça Ramón Mas i Campderrós.
En el ño 2002, conseguimos que el Ayuntamiento no construyera el Mercado Torre de la Vila en medio de la plaza tal como tenía proyectado, y construyera la plaza y el mercado tal como estaba proyectado en el año 1996. En este mismo año al ver que el Ayuntamiento por dos veces consecutivas quería construir en ella, y otra asociación vecinal no se movilizó para evitarlo porque estaba conforme en ello, decidimos fundar nuestra propia asociación para defender el barrio y trabajar por él, nunca con intención de competir con nadie. Esta plaza ha dado un ambiente enorme al barrio que es un orgullo para los vecinos y la ciudad.
En el año 2003, conseguimos que se cambiara la gravilla por césped en los dos extremos del paseo de la calle Joventut, se instalaran fuentes de agua potable a lo largo del paseo, y se cambiaran los columpios que había delante del bloque de vecinos nº 22 de la calle Joventut, ya que estos llevaban más de tres años que estaban inservibles.
En el año 2004, una vez inaugurada la plaza Ramón Mas i Campderrós, hicimos que el Ayuntamiento modificara todas las deficiencias que observamos en ella.
En el año 2005, exigimos al Ayuntamiento que obligara a la empresa Catering Roma a cambiar su ubicación, ya que entendimos que al estar ésta situada debajo de los bloques de vecinos Joventut, 8 y Aleix Parés i Valls, 7 y 9, al utilizar en su actividad cocinas industriales en cualquier momento se podía producir una explosión de gas, causando una tragedia muy grande.
En el año 2006, conseguimos que el Ayuntamiento construyera unos pasos elevados en todo el carril de vecinos o servicios de la calle Joventut, a fin de evitar accidentes.
En el año 2007, conseguimos que el Ayuntamiento cambiara los juegos infantiles del paseo de la calle Joventut, y los cerrara con vallas de acero inox.
En el año 2008, conseguimos que se cambiara la parada de autobuses situada a la Ronda Sant Ramón - Dr.Ignasi Barraquer (junto al antiguo cine Casablanca), ya que al no tener laterales los usuarios pasaban mucho frío, y si llovía se mojaban.
En el año 2009, después de haber pintado el carril bici en medio del paseo de la calle Joventut se lo hicimos borrar, porque este paseo siempre ha sido para pasear las personas y no podíamos permitir que ahora lo disfrutaran los ciclistas en vez de las personas, también hicimos que se cambiaran los bancos de madera, ya que al ser estos muy bajos las personas mayores tenían muchas dificultades a la hora de levantarse.
También quiero resaltar que durante todos estos años hemos organizado cuatro fiestas infantiles en el transcurso del año (en enero entrega de cartas para los reyes; en febrero fiesta de disfraces; en septiembre juegos infantiles y chocolatada; y en diciembre la fiesta del caga Tió), para que nuestros hijos disfrutaran de ellas y tuvieran unos recuerdos muy bonitos de su infancia.
