Como padre que soy me he quedado muy sorprendido al conocer la noticia de que unos padres fueran detenidos por detención ilegal al no permitir que su hija de 16 años saliera de casa y sin haber malos tratos. Sus padres la castigaron sin salir de casa, la joven los denunció y la Guardia Civil detuvo al matrimonio. Estos hechos sucedían el pasado día 28 de febrero en la localidad de Baeza (Jaén).
Al parecer, el progenitor decidió que su hija no podía salir, supuestamente, para reprenderla por su comportamiento, cosa muy normal en cualquier casa cuando una hija menor no se comporta correctamente, o quiere ir a un lugar que se cree que no es adecuado.
Creo que todos los padres queremos lo mejor para nuestros hijos, con lo cual si en un momento determinado creemos que no debemos permitir que salga de casa estamos en nuestro derecho de hacerlo, y no por ello nos tiene que detener la Guardia Civil como es el caso.
Últimamente en este país hemos perdido el norte al permitir que nuestros hijos puedan hacer lo que les venga en gana y encima les ampare la Ley del Menor. Se les ha permitido que puedan tomar la píldora del día después cuantas veces lo deseen sin ningún control médico ni saber los efectos adversos, pueden abortar sin permiso paterno, cuando si lo necesitan para ir de excursión o de colonias con el instituto en el que estudian.
Recientemente hemos visto en Valencia unos hechos que deberían de preocupar y mucho a los padres, o por lo menos a mí me preocuparía muchísimo que un personaje como Albert Ordóñez fuera el representante de mis hijos, que pide que en la calle haya una lucha a sangre y fuego, que diga en su página de Facebook -que ya la ha retirado de la red- que le gusta Amaiur -brazo derecho de la banda terrorista de ETA-; que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, debería de mirar debajo de su coche cuando sale de casa; que la libertad se consigue con violencia, entre otras barbaridades de juzgado de guardia.
Todo esto nos debería de preocupar mucho a todos los padres sea cual sea nuestra ideología política o religiosa, Hay una frase muy bonita que nos debería de hacer reflexionar a todos “Educad a los niños y no hará falta castigar a los hombres”.
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