Paradojas del destino han hecho que el Sindicato Comisiones Obreras (CCOO) de Cataluña haya tenido que aplazar unos días las nóminas de diciembre de sus trabajadores mientras, a la vez en el tiempo, critican que la Generalitat de Catalunya aplace el pago de la paga extra de los funcionarios.
No será hasta el próximo 4 de enero de 2012, en lugar del 31 de diciembre de 2011, cuando los 300 trabajadores de CCOO cobrarán la nómina del último mes del año.
Desde CCOO se ha acusado a la Administración autonómica de no pagar la subvención de este año por lo que el sindicato se ha visto obligado, justifican, a tomar una decisión tan drástica.
Además, en 2011, según han reconocido han descendido los ingresos por afiliación. Aunque sí han puntualizado que el número de afiliados se mantiene estable, pero los ingresos de las cuotas van en función de la situación laboral de los afiliados, de forma que los que están en activo pagan más que los que no tienen empleo.
CCOO acusa a la Administración de que ha incumplido un pago presupuestado. "Se trata de una subvención presupuestada y aprobada, pero aún no se ha hecho efectiva", explicó Dolors Llobet -foto-, tras anunciar que aplazarán el pago de la nómina de los trabajadores.
Eso sí, Llobet ha recordado que el aplazo del pago de la nómina de diciembre al día 4 de enero está dentro de la legalidad, y ha asegurado que sí se ha abonado ya la paga extra de Navidad. Y ha rechazado la posibilidad de que esta situación se pueda volver a dar en el mes de enero.
Es vergonzoso que una partida de los presupuestos anuales de la Generalitat cuyo dinero es de los contribuyentes sirva para pagar el sueldo a estos sindicalistas vividores, cuando deberían autofinanciarse de la cuota de sus afiliados.
Recordemos que tanto CCOO como la Unión General de Trabajadores (UGT) son cómplices de que con el Gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero más de 5.000.000 de personas hayan perdido su empleo, que por no perder precisamente las subvenciones estos apaniguados le permitieron desgraciadamente llegar a esta cifra. Y encima tienen la poca vergüenza de lucrarse con los Expedientes de Regulación de Empleo (EREs).
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