Fue encarcelado seis meses por el robo de dos gallinas por necesidad. Poco después, el 5 de marzo de 1965, él y dos más cometieron un atraco a una joyería en la calle de Bravo Murillo de Madrid, en el cual murió el vigilante de seguridad del establecimiento, y fueron robadas 120.000 pesetas.
Aunque nunca se supo quien de los tres asesinó al vigilante, el Lute fue condenado a prisión hasta el 20 de junio de 1981, qué quedó en libertad definitivamente.
Desde aquel 20 de junio 1981 al día de hoy habido muchos “lutes”, pero estos no son mercheros ni han robado gallinas por necesidad, sino que son unos señores de corbata que han robado millones de euros para enriquecerse a costa de los contribuyentes.
No voy a entrar a nombrarlos todos porque la lista es interminable, pero recientemente hemos conocido el “caso Campeón” -lea los últimos post- que presuntamente está implicado el ministro de Fomento, José Blanco, por trafico de influencias pidiendo y haciendo favores a cambio de dinero.
Pero lo que me ha sorprendido de verdad, y me pregunto ¿Qué necesidad tenia en meterse -presuntamente- en el lío que se ha metido de corrupción el Duque de Palma e yerno del Rey de España, Iñaki Urdangarín? Lo cual ha salpicado a la Casa Real.
El cerco judicial sobre Iñaki Urdangarín se estrecha cada día más, después de que la policía se incautase el pasado lunes en Barcelona y Valencia abundante documentación sobre el Instituto Nóos, que obtuvo entre 2005 y 2006 casi cinco millones de euros en subvenciones cuando el yerno del Rey ocupaba el cargo de presidente. La entidad, supuestamente sin ánimo de lucro y dedicada al patrocinio y mecenazgo deportivos, se habría apropiado de fondos públicos mediante la utilización de facturas falsas y otros artificios contables, fuentes de la investigación. Todo ello le puede costar más de 15 años de cárcel.
Cuando se empezó a descubrir el pastel, el Rey Don Juan Carlos ordenó borrar de la biografía oficial del Duque de Palma toda mención a su etapa en Nóos y envió a Urdangarín y a su familia a vivir a una lujosa zona de Washington.
Pero lo que me llama mucho la atención es que justamente cuando sale a la luz pública el caso Campeón que afecta al hoy todavía ministro de Fomento José Blanco, después de mucho tiempo investigando salga justamente ahora el caso de Mallorca ¿Qué casualidad verdad?
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