El pasado 27 de diciembre José Montilla, del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) dijo adiós a la presidencia de la Generalitat, pero no a los múltiples beneficios que el haber ostentado el cargo le deja: cobrar el 80% de su sueldo por un máximo de dos años, tres personas a su servicio, coche oficial, un despacho en la Rambla de Cataluña (zona más céntrica y cara de Barcelona), entre otros.
El ya ex presidente de la Generalitat ha cedido el bastón de mando a Artur Mas, de Convergència i Unió (CiU), pero aún seguirá disfrutando de las ventajas del cargo durante mucho tiempo.
En 2003, el tripartito compuesto por el Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), e Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), con Pasqual Maragall (PSC) a la cabeza, como no podía ser de otra manera aprobó una ley para los expresidentes disfrutasen de las ventajas de haber ostentado el cargo una vez hubiesen dejado el cetro de mando. En virtud de esa norma. Montilla ha dejado el cargo con el 80 por ciento del sueldo -135.000 euros brutos anuales- durante dos años.
Tanto los expresidentes Jordi Pujol (CiU) como Pasqual Maragall (PSC) están disfrutando de las virtudes de haber sido presidente. Entre los beneficios está también el derecho, sin límite de tiempo, a disponer de tres personas a su servicio, con dedicación especial, además de una dotación presupuestaria para gastos de oficina, atenciones de carácter social y para alquiler de inmueble (pagando los contribuyentes, claro).
A José Montilla le ha faltado tiempo para hacer el primer fichaje y ha nombrado al exsecretario General de Presidencia, Jordi Menéndez i Pablo, como responsable de su oficina, según una resolución publicada en el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) con fecha de 30 de diciembre de 2010.
Menéndez fue alcaldable por el PSC en Sant Cugat del Vallés y miembro del consejo de administración de la CCRTV. Con Montilla de presidente fue sucesivamente director general de Difusión Corporativa, director general de Relaciones Externas (2006-2008) y secretario general adjunto de la Presidencia del Gobierno.
Entre sus funciones tendrá que "dirigir y organizar las tareas de todo el personal de la Oficina", "organizar y controlar los actos, las audiencias, las visitas y los viajes del expresidente", "gestionar y controlar el presupuesto asignado a la Oficina" y "hacer tareas de protocolo y de relaciones con la prensa y los medios de comunicación del expresidente".
"Las retribuciones de este puesto de trabajo son las correspondientes a un lugar de funcionario/aria del grupo A, nivel de destino 30, y complemento específico de 63.242,04 euros anuales", según la misma resolución.
Cuando a cualquier ciudadano se nos cesa o se nos despide de la empresa que prestamos nuestros servicios se nos paga la indemnización correspondiente y hacer cola a la Oficina de Empleo, en este país nuestros políticos siguen cobrando buenos sueldos y continúan viviendo del cuento y sin dar golpe. Así nos va.
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