dissabte, 12 de desembre del 2009

“Chantaje insoportable”

  aminatu haidar

Hablan de “chantaje insoportable”. Así se pronuncian personas del entorno del presidente del Gobierno José Luis Zapatero, a propósito de la decisión de Aminatu Haidar y de las reacciones que está provocando el caso. Y su máximo temor es que pueda morir en España.

En el Ejecutivo y en el PSOE existe un enorme enfado ante la que se está montando en torno al caso de la activista saharaui en huelga de hambre, por el enorme eco que está teniendo, por las críticas cada vez más fuertes al propio Gobierno, y por los problemas que está planteando en las relaciones con un vecino tan complicado como es Marruecos.

Fuentes del entorno de La Moncloa cuentan que el Gobierno considera “muy injusto” lo que está ocurriendo, sobre todo por las acusaciones y críticas que le están cayendo encima. El Gobierno cree en todo momento haber actuado con “la mejor voluntad”.

Sobre la actitud de la activista saharaui, en esos ámbitos se le achaca que está “buscando protagonismo” e incluso se escucha que “es ella la que ha querido estar así”.

Igualmente, hay queja por la actuación de artistas e intelectuales de la izquierda, como por ejemplo los cineastas: se considera que están aprovechando la situación para presionar en defensa de una causa como es la reivindicación independentista del pueblo saharaui. Y lo mismo está haciendo el Partido Popular, por su lado. El Gobierno critica tanto a quienes están aprovechando esa “presión” como la “irresponsabilidad” al ejercerla.

Las fuentes a las que ha escuchado ECD destacan la gravedad del problema que se está creando con Marruecos, e insisten en que en este contencioso “hay mucho, muchísimo en juego”.

El problema añadido –reconocen- es que el Gobierno no puede decir nada de nada sobre el caso de Aminatu Haidar y su reclamación de volver a El Aaiún, porque cualquier cosa que dijera, en cualquier sentido, se volvería en su contra. Tienen que permanecer callados.

Y se plantean una inquietante pregunta: “Si Haidar muere, como consecuencia de la huelga de hambre, ¿hasta dónde llegará la violencia contra nosotros?”.