Parece mentira que una persona que quizás va a ver un espectáculo a pasar un par de horas divertidas y olvidarse de los problemas cotidianos pueda ser tan estúpida.
Fue el pasado viernes por la noche cuando, en plena función de “Hair”, la Agencia de Salud Pública de Barcelona advirtió a los responsables del musical del Teatro Apolo que si no apagaban los cigarros encendidos en el escenario, recibirían una multa. La denuncia, a la que tuvo acceso La Vanguardia.es, la interpuso un espectador. Los hechos denunciados son que durante la representación de la obra los actores fuman en el escenario, en el patio de butacas, en el vestíbulo y llegan a ofrecer cigarros a los espectadores. La cuantía de la multa podría ascender a 10.000 euros.
A pesar de la demanda, los responsables del musical han decidido que se continuará fumando durante las funciones. El director de producción de “Hair”, Roger Peña, argumentó que la demanda no tiene “ningún sentido” puesto que lo que se fuma en el escenario “no es tabaco” sino una mezcla de hierba Maria Luisa, hojas de nogal y albahaca, comprada en una herboristería. “Lamentamos que la gente tenga tan poco trabajo como para denunciar a un espectáculo como “Hair” y muchos otros donde, por exigencias del guión, es imprescindible fumar”, dijo Peña.
El caso de “Hair” no es único ya que otras obras como “L’arquitecte”, que se representa en el Teatre Lliure, y también “Quadern gris”, que se puede ver en el Teatro Romea, también utilizan tabaco en sus espectáculos
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