Cuando yo creía que personas (sobre todo las mujeres) que ocupan altos cargos de este país tenían una educación y respeto admirable hacia sus subordinados, una persona me ha demostrado que estaba totalmente equivocado.
Un cruce de correos electrónicos le ha costado el puesto al que ha sido director provincial de Tráfico en Palencia durante los últimos treinta años, Manuel Esteban Figuero, cuando tan solo le quedaban dos meses para jubilarse al alcanzar la edad reglamentaria.
La historia comenzó cuando Manuel Esteban remitió un correo de queja a la subdirectora general de Formación para la Seguridad Vial, Aurora Cedenilla Díaz, reprochándole el contenido soez de sus felicitaciones de Año Nuevo.
El director provincial de Tráfico recriminó a su superior que utilizara expresiones, que calificó como «horterada y de mal gusto, que en el mejor de los casos debería reservar para sus círculos íntimos».
Manuel Esteban indicó a la subdirectora de Tráfico que en las felicitaciones dirigidas a todos los responsables de este organismo oficial no debe utilizar expresiones como «por el culo te la hinco» o «chúpame un huevo».
Y aunque la propia Aurora Cedenilla respondió al mensaje con otro correo de «sinceras disculpas», el reproche de Manuel Esteban no debió sentar bien al director general de Tráfico, Pere Navarro, quien consideró que la actitud del responsable palentino era una falta de respeto a un superior, ya que no se dirigió exclusivamente a su superior si no que fue reenviado también al resto de funcionarios que habían recibido la particular felicitación de Año Nuevo.
Esteban presentó su dimisión, que se hizo efectiva a partir del 1 de febrero, pasando a ocupar un puesto de funcionario raso hasta su jubilación, dentro de dos meses.
Manuel Esteban se encuentra muy apesadumbrado y no ha querido efectuar ninguna manifestación pública para no dañar la imagen de un organismo para el que lleva trabajando más de 49 años y que ha dirigido en Palencia durante los últimos 30, por lo que hasta su cese era el decano de todos los directores provinciales de Tráfico de España.
En cualquier país a la que hubieran cesado es a la subdirectora general de Formación para la Seguridad Vial, Aurora Cedenilla Díaz, por soez y maleducada, pero aquí se protegen entre ellos y siempre pagan los mismos.
Pero lo vergonzoso es por lo que se ve, durante varios años esta “culta” subdirectora general a la que le pagamos un gran sueldo, ya enviaba felicitaciones de esta índole y nadie se quejaba, y ahora que lo hace el director provincial (que ha demostrado tener más pudor que ella) lo meten a barrer como aquel que dice. Este país está pulverizado por no decir podrido.
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