La integración socio-laboral es uno de los grandes problemas actuales. En momentos de crisis, no sólo económica, es necesario rodearse de personas dispuestas a ayudar, personas optimistas que confíen en el cambio, en el progreso y mejora de la calidad de vida, personas que con su esfuerzo hagan realidad la ilusión de aquellos que no encuentran salida. Este es el caso de Norte Joven, asociación cultural sin ánimo de lucro que lleva más de 25 años trabajando por la integración socio-laboral de jóvenes y personas adultas desfavorecidas o en riesgo de exclusión social, mediante talleres que les permitan aprender un oficio.
Se desarrolla en los Centros Taller y en la actualidad acoge a 185 alumnos/as, españoles y extranjeros, que cursan estudios en diferentes disciplinas como electricidad, fontanería, carpintería o cocina. Desde el comienzo, el perfil del colectivo atendido ha ido ampliándose y diversificándose en diferentes grupos, desde adolescentes y jóvenes entre 12 y 15 años, hasta adultos en situación de desventaja por distintos motivos: inmigración, drogodependencia, desempleo o prisión, entre otros. (Aquí dejo la web http://www.nortejoven.org de esta asociación por si desea conocerla más y mejor.)
Cuentan con un amplio equipo de trabajo, de cuyo compromiso depende el futuro de la asociación. Está compuesto tanto por profesionales remunerados, Junta Directiva y Asamblea General entre otros, como de voluntarios que gracias a su esfuerzo permiten mejorar la situación de quienes acuden con la esperanza de tener un futuro.
Lo que más destacan los alumnos que participan en Norte Joven es la posibilidad de formarse cultural y laboralmente de forma gratuita, gracias a las numerosas organizaciones colaboradoras que dan soporte económico a las actividades, facilitando así la integración laboral del alumnado: Administraciones Públicas (local, regional, nacional y europea) y, empresas e instituciones públicas y privadas.
Iniciación su andadura en 1985 y, desde entonces no han parado de obtener importantes reconocimientos a su labor como el Premio Reina Sofía de la Fundación CREFAT a la mejor labor social en 1996 o el reconocimiento de la UNESCO a su investigación sobre "Factores culturales estratégicos en el desarrollo local". En 1996 consiguieron el Premio Miguel Hernández del Ministerio de Educación y Cultura y recientemente, han sido galardonados con 18.000€ gracias al Premio BigMat a la Solidaridad 2010, éste último dirigido a financiar aquellos proyectos que hayan contribuido a crear una sociedad más justa y comprometida con la realidad actual.
El premio BigMat ha concedido además dos accésit de 3.000€ cada uno, tanto a la Fundación J. Fernández del Cotero por el centro oftalmológico levantado en la diócesis católica de Dapaong (Togo, África) para remediar y prevenir la ceguera reversible y otras patologías oftalmológicas de la zona, como al proyecto "Romper Cadenas" de las H.H Mercedarias de la Caridad en la ciudad de Granada, cuyo objetivo es acoger a internas que no cuentan con apoyo familiar, pero que tienen que hacerse cargo de algún hijo de corta edad, durante sus permisos o cuando se encuentran en libertad condicional.
Luis Pérez, presidente del jurado, destacó la difícil tarea que ha supuesto la selección de tres finalistas."Hemos recibido más de ochenta candidaturas que reflejan el esfuerzo de muchos hombres y mujeres que dedican su talento y su tiempo a labores dignas de nuestra admiración. Desde sencillos proyectos en localidades repartidas por toda la geografía española a grandes retos en países del tercer mundo".
Éstos son sólo un ejemplo de todos aquéllos que con su esfuerzo promueven proyectos para mejorar la situación de los más desfavorecidos.
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