divendres, 5 de març del 2010

El reconocimiento del derecho a vivir dignamente

  pobreza y hambre

Con el título "La pobreza no es sólo una cuestión de dinero, es una cuestión de derechos humanos", Amnistía Internacional ha lanzado una campaña en la que pide a los gobernantes que sitúen los derechos humanos en el centro de su liderazgo.

"La pobreza no es inevitable: es consecuencia de políticas y prácticas concretas", indica la campaña, que exige a los países del G-20, "que se han proclamado líderes para abordar la crisis económica", que hagan el mismo esfuerzo en hacer frente a su responsabilidad con los derechos humanos de millones de personas que viven en la pobreza.

El pleno respeto a los derechos humanos exige el reconocimiento del derecho a vivir dignamente y a obtener alimentos, agua, asistencia médica básica, educación y refugio de todas las personas, añade la campaña.

Además, la crisis económica "está agravando lo que ya era una crisis de derechos humanos explosiva" dicen en la organización.

Por ello, Amnistía recuerda que las personas que viven en la pobreza no sólo sufren privaciones, sino que están atrapadas, excluidas, sin voz y bajo la amenaza de la violencia y la inseguridad, por lo que los derechos son clave para salir de la trampa en la que se encuentran.