Las familias españolas están mal informadas a la hora de comprar y consumir algunos productos que se presentan como bajos en grasas, según dice la profesora Maite García, directora del Diploma de Alimentación y Nutrición de la Escuela Nacional de Sanidad.
En el acto que se organizó ayer por la Fundación Vida Activa, con motivo de que hoy se celebra el Día Nacional de la Nutrición, García puso como ejemplo "errores bastante profundos por los cuales mucha población cree que tomar un queso fresco es tomar un queso sin grasa, cuando el queso fresco solo es la fase primitiva de un queso que aún no se ha secado adecuadamente, pero que nadie le ha sacado la grasa".
Añadió que, "como la gente cree que no tiene grasa y que es muy saludable, toma cantidades muy superiores a las que tomaría de un queso curado. En los quesos frescos también están las grasas animales, como estarían en los quesos curados".
García destacó también que no siempre los consumidores son conscientes de que están consumiendo grasas, ya sea en alimentos preparados o semipreparados. "Las salsas, como productos preparados, contienen grasas, y cuanto más espesas sean estas salsas, más grasas contienen", añadió.
Productos como bollería, fiambres rosados, embutidos, helados o galletas, así como la comida cocinada en barbacoas, tienen un contenido graso más alto del que generalmente se cree, según explicó también esta nutricionista.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada