El 71% de las mujeres que usan la píldora como método anticonceptivo la toman de forma incorrecta, mientras que este porcentaje desciende entre las que utilizan el parche (32%) y el anillo (22%), todos ellos métodos hormonales.
Así se desprende del informe nacional Consecuencias del uso incorrecto de los anticonceptivos hormonales, publicado este mes en la revista científica Contraception.
El estudio, realizado entre más de 26.000 mujeres de todas las comunidades autónomas que emplean este tipo de anticonceptivos, muestra las consecuencias emocionales que sufren las mujeres ante la incertidumbre de una posible pérdida de eficacia por un mal uso del método.
Entre dichas consecuencias, destacan la falta de concentración en su trabajo y el deterioro en su relación de pareja.
Relaciones sexuales sin protección adicional
En este sentido, del informe se desprende que el temor a quedarse embarazada es mayor entre las que emplean métodos diarios (44%) que entre las que usan los semanales (40%) o mensuales (20%).
No obstante, una de cada tres mujeres que cree que ha usado mal su anticonceptivo tiene relaciones sexuales sin protección adicional.
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