divendres, 6 de juny del 2008

Donación de órganos

  cirujanos realizando un trasplante

Ayer me sorprendí muchísimo cuando leí que actualmente en Cataluña hay 1321 personas esperando un órgano para sobrevivir, 90 personas más que a finales del 2007. 1070 están esperando recibir un riñón, 146 esperando un hígado, 26 esperando un corazón, 39 esperando unos pulmones y 40 esperando un páncreas.

Si todo esto lo contrastamos con la cantidad de accidentes mortales que desgraciadamente hay cada semana, podemos observar la falta tan grande de sensibilidad que tenemos los catalanes, sobre todo cuando desgraciadamente nos encontramos ante la perdida de un ser querido, al negarnos a dar sus órganos para que otras personas puedan sobrevivir. Últimamente, un 22 % de familias catalanas han renunciado a la donación de estos.

Una madre que en el año 1990 perdió a su hijo pequeño en un accidente de tráfico, decía, nuestra vida se paralizó, pero como madre me llena de satisfacción el saber que el corazón y otros órganos de nuestro hijo viven en otras personas.

Creo que un accidente mortal nos puede tocar a cualquiera en cualquier momento, por lo que hoy deberíamos tener todos muy claro, que nuestros órganos, o los de nuestro familiar pueden salvar la vida a otras personas, y tener siempre muy presente, que quizás mañana seamos nosotros quienes los necesitemos, y nos gustaría que alguien nos los diera.