Bienvenido Benedicto XVI a Barcelona

Bienvenido Benedicto XVI a Barcelona, hoy es un gran día para todos los creyentes que su Santidad esté entre nosotros, y le deseamos una feliz estancia en esta preciosa ciudad.

Benedicto XVI está hoy en Barcelona. Este viaje, aunque pastoral, no deja indiferente a nadie. Es más, no son pocos los que han querido desvirtuarlo convirtiéndolo en una visita político-nacionalista, caso de algunos líderes políticos, sindicales y otras muchas personas más que mueven masas en beneficio propio, que con ello han tenido la excusa perfecta para sacar a pasear la bandera del laicismo o el ateismo de Estado.

El pasado jueves en la plaza Sant Jaume de Barcelona hubo una manifestación contra la visita del Papa, todas las personas tienen derecho a protestar por este motivo, pero no con insultos, burlas y falta de respeto como hicieron, no olvidemos que Benedicto XVI, aparte de lo que representa es una persona de 83 años de edad, solo por esto ya merece un respeto.

Sin embargo, la institución a la que representa el Papa –la Iglesia católica- está acostumbrada a superar todo tipo de contratiempos a lo largo de sus más de dos mil años de existencia, con roces institucionales con personajes históricos como Nerón, Calígula, Diocleciano, Enrique VIII, Napoleón, Robespierre, Hitler, Mussolini o Stalin, por ejemplo, no han logrado apartarla de su universal ideario, aunque su figura central y actual, el Papa Benedicto XVI, despierta también tanta pasión y odio como ya lo hizo Jesucristo.

Pero muy a pesar de laicos, ateos, gays, lesbianas, sindicalistas, feministas, etc. Benedicto XVI abrirá hoy la ventana de Barcelona, y dará a conocer al mundo entero la gran obra de Antonio Gaudi, el Templo de la Sagrada Familia.

No quiero finalizar este post sin antes reprocharle al presidente del Gobierno español José Luís Rodríguez Zapatero, por improvisar un viaje para visitar las tropas del Ejercito en Afganistán, para dar esquinazo al Santo Padre en la visita de éste a Santiago de Compostela y Barcelona (aunque si tiene previsto ir a despedirle al aeropuerto de El Prat), y por la cobardía de no asistir a los actos religiosos por el miedo de ser abucheado. No olvidemos que Zapatero no tuvo ningún pudor en octubre de 2009 en visitar la Mezquita Omeya en Damasco para oír el imán, ni para asistir y participar el pasado mes de febrero en Washington al Desayuno Nacional de la Oración, leyendo un pasaje de la Biblia.