dimarts, 5 d’agost del 2008

El veneno de las serpientes

  cobra

El veneno de una serpiente cambia de su infancia a su madurez para permitir que se adapte al medio en el que habita y garantizar su supervivencia, según las conclusiones de un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Al lograr identificar qué toxinas varían en el veneno de serpientes de la misma especie, el estudio tendrá relevantes aplicaciones en la producción de antisueros.

El trabajo, que aparece publicado en la revista "Journal of Proteome Research", ha sido dirigido por Juan José Calvete, investigador del Instituto de Biomedicina de Valencia (CSIC).

Concretamente, Calvete ha analizado la variación de los venenos en individuos de la serpiente "Bothrops asper", procedente de Costa Rica (tanto de la vertiente del Mar del Caribe como la del Océano Pacífico), que causa la mayoría de las mordeduras en Centroamérica.

"Se trata del primer estudio que ha conseguido abordar en detalle una caracterización de los venenos de serpientes, adultas y de pocos días de vida, de poblaciones separadas gracias a técnicas especializadas en el análisis masivo de proteínas", destaca el investigador del CSIC.

Su análisis ha revelado diferencias que rondan casi el 50% en la composición proteica del veneno de serpientes de la misma especie en función de su edad y localización geográfica