Según informa Europa Press.- Un mes después del derrumbe del túnel de bateo del campo de béisbol de Sant Boi de Llobregat (Barcelona) como consecuencia del temporal de viento, únicamente permanece hospitalizado un niño de las nueve personas que sufrieron heridas. El Ayuntamiento está a la espera de los informes que encargó para evaluar las causas del siniestro que está siendo investigado por un juzgado de Sant Boi.
El 24 de enero, el fuerte temporal de viento que afectó a Cataluña provocó el derrumbe del túnel de bateo del campo municipal de béisbol de Sant Boi. Como consecuencia del siniestro, cuatro niños de 9 a 11 años fallecieron, mientras que nueve personas sufrieron heridas (siete niños y dos adultos). Uno de los niños permanece en el Hospital de Sant Joan de Déu. Su estado es "estable", según fuentes municipales, y se prevé que pueda recibir el alta en los próximos días.
Según las primeras conclusiones del informe municipal, el túnel había sido construido "adecuadamente" y se derrumbó a causa del viento excepcional. El consistorio encargó tres informes para aclarar las causas al Colegio de Arquitectos de Barcelona, al Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Cataluña, y al Departamento de Física Aplicada de la Universitat Politècnica de Cataluña (UPC).
Fuentes municipales informaron que los datos preliminares del informe de la UPC -que concluirá próximamente- determinan que en el siniestro confluyeron varios factores imprevisibles y, entre ellos, la fuerza del viento. Los otros dos informes todavía están pendientes de concluir.
El siniestro está siendo investigando por el Juzgado de Instrucción número 3 de Sant Boi que ha encargado un informe pericial sobre los hechos y ha tomado declaración a varios testigos. Por su parte, las familias de los niños fallecidos se han personado en el caso como acusación particular.
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