divendres, 12 de febrer del 2010

La eliminación del burka

  burka

El presidente del Partido Popular en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, apuesta por que el Consistorio promueva la prohibición del burka, y considera que "la primera obligación" de los inmigrantes debe ser cumplir la ley y respetar la ciudad, la sociedad y el país que los acoge.

"Yo no voy contra los inmigrantes, yo creo que, además de tener derechos, tienen obligaciones como cualquiera de nosotros". Así lo ha manifestado Fernández Díaz ahora que está reciente la polémica de Vic sobre el empadronamiento, y ahora que el burka vuelve a debatirse en Europa. También recuerda que hace tres años ya lo reclamó y le acusaron de racista y xenófobo. Añade que aunque el Ayuntamiento negó que se utilizara esta prensa, él mismo presentó fotografías de mujeres con burka en el barrio del Raval.

Lo considera un problema, y crítica que "algunos, cuando tienen el problema, en lugar de resolverlo, lo niegan o miran hacia otro lado". Aboga por dejar de ser políticamente correctos, y se preguntó: "¿Por qué debemos tener miedo y reservas de decir que la inmigración debe cumplir la ley como cualquier otro de nosotros? ¿Es racista? No. No digo nada que no me exija a mí mismo".

Insiste en reclamar "más rigor" del Ayuntamiento en el padrón, que exija documentos originales a los nuevos inscritos, y que la Policía Nacional acceda a él para expulsar a los inmigrantes ilegales. Si bien afirma que el objetivo del censo no es controlar la inmigración ilegal, sostiene que "es una buena herramienta para controlarla y luchar contra las mafias que los explotan".

Contrapone también la falta de rigor en el padrón a su uso por parte de la Guardia Urbana para investigar a familias y sancionarlas si se han censado en casa de familiares para poder escoger colegio para sus hijos, detección de la que "se vanagloria" anualmente el Gobierno municipal en rueda de prensa.